Schindler's List , una historia de redención. Desgarradora, estremecedora, retumba en el alma, así es La Lista de Schindler. El Shoah siempre será un episodio histórico que servirá de fuente en la que beba el séptimo arte. El asesinato de la manera más infame de más de 6 millones de personas por parte de uno de los pueblos más educados de Europa, la exterminación sistemática y sin justificación de una parte enorme del pueblo judío es algo que hoy, a casi 80 años de que se iniciara esa tragedia, nos sigue impresionando. Pero siempre habrá un justo en Sodoma y entre toda esa orgía de muerte y destrucción, quedó gente que se ganó con su grandeza, el apelativo de seres humanos. Personas que con su bondad y su decisión de contrariar la locura mainstream de esa época, hoy merecen ser recordados. Uno de esos personajes fue Oskar Schindler . Bon vivant y afecto más al dinero que al humanitarismo, Schindler vio en la guerra de Hitler el escenario perfecto para forrarse a costa de...
El cine mexicano versiona el largometraje colombiano del 2001, La Pena Máxima
![]() |
El fútbol ocupa un lugar muy importante en la nación mexicana |
Los
remakes, es decir, las adaptaciones de una obra ya realizada han sido parte del
cine desde que este existe. Ben Hur,
por ejemplo, fue una muestra de remake en los tempranos años 30. La constante
siempre ha estado ahí, más o menos estable, hasta que al albor del nuevo siglo éstos
se empezaron a multiplicar, desbordando la necesidad y el decoro. Ni qué decir
tiene que se hace por dinero. Para la muestra, el arácnido super héroe, con 3 reinicios
en menos de 20 años y la próxima Ocean’s
8, un remake en clave femenino sobre el robo de un casino de Las Vegas. Hasta
aquí, todo bien. El remake era algo de las grandes productoras y casi siempre
copiando lo europeo o lo asiático. Lo sorprendente es que Colombia, que ha intentado desatinadamente copiar siempre lo de afuera, tenga por estos días su
primer largometraje que es adaptado allende las fronteras.
El largometraje es una producción colombo mexicana, en la que Dago García juega un papel fundamental
![]() |
No es fácil entender el nivel de fanatismo que el deporte de las masas puede generar en ciertas personas |
En
2001, Dago García, un director tan denostado por la crítica ‒al que nos gusta
imaginar que llora por cómo lo califican, mientras se limpia las lágrimas con
billetes de 100 dólares en su apartamento de mil metros cuadrados‒, como amado por la taquilla, produjo un largometraje
llamado La Pena Máxima. La nación
colombiana es muy dada a los fanatismos políticos, religiosos y, cómo no,
deportivos. Colombia no se salva de la devoción al deporte de las masas,
realidad aprovechada por Dago García para hacer un largometraje sobre hasta
dónde es capaz de llegar un colombiano por su equipo nacional de fútbol. Muy
adecuada para el público que sólo busca la risa fácil y sin sentido, el film epidérmico, La Pena Máxima, fue un exitoso largometraje que propició varios largometrajes similares y olvidables. Este año, nuestros hermanos mexicanos,
que adoran incluso al deporte de la redonda más que los colombianos, nos traen la
adaptación a la mexicana del largometraje de García.
![]() |
La versión colombiana contó con actores talentosos como Robinson Díaz y Enrique Carriazo |
¿El
argumento es similar a la mayoría de los filmes sobre fanáticos del deporte: un
aficionado que piensa que todo lo demás es carente de importancia, excepto el
fútbol. Y entre todos los equipos de fútbol, ninguno reviste tan supremo valor
como la selección nacional. Dispuesto a hacer lo que sea por su selección ‒se
ve que no estudió‒, Mariano Cárdenas (Adrián Uribe) piensa que su adorado
equipo nacional solo podrá llegar a la máxima cita orbital del fútbol si él, fuente
superior de toda suerte y amuleto único de «El Tri», está presente en el duelo
contra el máximo enemigo deportivo de su país: los Estados Unidos. Dispuesto a
todo por su sele, Mariano no dudará en poner todo lo que le es caro al servicio
de ésta, con incalculables consecuencias. Un largometraje con un par de risas
interesantes, quizá un poco más tolerable que su versión colombiana.
** 2 estrellas de 5
Lo mejor: que se hagan producciones internacionales en coproducción.
Lo peor: de tanto que se puede rehacer, tenía que ser una de Dago?




Comentarios
Publicar un comentario